
Alimentar mi espíritu
¿Qué tal qué cada mañana me veo en el espejo y respondo a estas cuatro preguntas?
¿Qué resultados tendría? ¿De qué manera impactaría en mi vida y en la de la gente que me rodea? ¿Cómo estarían mi ánimo y mi espíritu? Comprometerme con otros es muy valioso, pero lo es aún más comprometerme conmigo.